Unas tumbas de la cultura zapoteca, excavadas en el valle de Oaxaca (México), han permitido a los arqueólogos confirmar la teoría según la cual los zapotecas tallaban cetros empleando los fémures de sus gobernantes fallecidos. Los investigadores han encontrado numerosas tumbas en las que siempre faltaba uno de estos huesos. Creen que, en las dinastías zapotecas, cada primogénito recibía el fémur decorado de su padre muerto.
La cultura zapoteca se remonta al año 800 a.C, cuando ocupó los valles centrales del actual estado mexicano de Oaxaca, siendo una de las civilizaciones más importantes de la Mesoamérica precolombina.
Leído en: National Geographic.
Filed under: General
Trackback Uri